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Las sociedades del antiguo Perú ya estaban conectadas entre sí hace 5 mil años [FOTOS]


Los últimos hallazgos arqueológicos sugieren que las antiguas sociedades de la costa, sierra y selva del actual Perú establecieron un sistema de comercio y de relación interregional durante la época de la civilización Caral.

En la actualidad, en las ciudades de la costa peruana uno puede ir a cualquier mercado y comprar frutas de la amazonia sin ninguna dificultad; se puede comprar pescado del mar costero en cualquier mercado de la sierra y la gente de nuestra amazonia puede comprar y disfrutar de los variados tubérculos que se cultivan en los andes. Claro, esto es posible porque tenemos un país interconectado con un sistema interregional de comercio bien establecido.

Lo sorprendente es, una vez más, que nuestros antepasados ya tenían esta noción de un sistema de comercio y de relación interregional hace cinco mil años. Por ejemplo: Áspero, que era una ciudad pesquera y que formaba parte de la antigua civilización Caral, promovió un sistema para lograr conectar con otras sociedades que se hallaban dentro y fuera de nuestro actual territorio. A esta nueva conclusión han llegado los investigadores de la Zona Arqueológica Caral (ZAC).

Áspero y los maestros del mar

Hace un poco más de 14 años se iniciaron los trabajos de investigación arqueológica en la zona de Áspero, una antigua urbe ubicado en el actual distrito de Supe Puerto, en la provincia de Barranca (al norte de Lima, Perú). Pero, tristemente, la primera gran labor de los investigadores fue retirar alrededor de ocho mil toneladas de basura que cubrían este antiguo sitio arqueológico, debido a que en ese momento estaba convertido en un botadero de desechos de dos municipalidades.

Los últimos descubrimientos en la Ciudad Pesquera de Áspero revelan el comercio que 
se realizaba con las costas de Ecuador y con la Amazonía.

En declaraciones al diario El Comercio la doctora Ruth Shady dijo que Áspero, por aquel entonces, era considerado un sitio sin ningún valor, por eso lo empleaban como un depósito de basura.

Esta antigua ciudad tuvo un rol muy importante en el desarrollo de la civilización Caral. Según afirma la doctora Shady, era la fuente de recursos marinos, especialmente de anchoveta, que era el 90% del aporte proteico de la población de aquella época. Aunque también se han hallado restos de los productos agrícolas que consumían los antiguos caralinos; entre ellos se ha registrado pacae, achira, frijol, guayaba, zapallo y pallar. El pallar y el frijol eran combinados con la anchoveta, esa fue la base alimentaria de estas antiguas poblaciones.

Para los investigadores esto está sustentado con el hallazgo de avanzada tecnología de pesca: tales como anzuelo a base de valvas de choros, flotadores de mate, redes hechas de algodón y pesas líticas. Y aunque no se han hallado restos que evidencien algún tipo de embarcaciones, en el sitio arqueológico han sido identificados restos de peces que solo se hallan mar adentro.

Los investigadores han hallado avanzada tecnología de pesca en Áspero.

| Ilustración: Zona Arqueológica Caral

Áspero pasó de ser un pequeño pueblo rudimentario donde la gente dormía en precarias viviendas hechos con esteras y palos, a una gran urbe que poseía zonas específicas para almacenamiento, edificios públicos multifuncionales y residencias; esto gracias al gran valor de los recursos marinos y la influencia de Caral.

Una sociedad milenaria e interconectada

Pero Áspero no solo fue un rico asentamiento pesquero en su tiempo. El equipo de especialistas de la ZAC desenterró una serie de elementos que no son propios de la región costera. Se han hallado vestigios de tubérculos que son propios de la sierra, como la papa y la oca. Se han hallado plumas de guacamayos, caparazones del caracol amazónico megalobulimus, adornos con representaciones del mono aullador y “ojos de Dios”, que son propios de la selva, la región que evidencia mayor presencia en el sitio.

Se han hallado una numerosa cantidad de productos de la selva. Por ejemplo: las
plumas de guacamayo verde y los tocados con el diseño conocido 
como “ojo de Dios”.

Los “Ojos de Dios” son adornos que las comunidades nativas amazónicas emplean en báculos o coronas, incluso en la actualidad. Los arqueólogos han desenterrado 32 de estos adornos en Áspero y 8 en la ciudad de Caral.

Del mismo modo, se han hallado objetos hechos a base de spondylus, moluscos que son propios de las aguas cálidas del mar ecuatoriano. Para los expertos esto sugiere un encuentro comercial con la antigua cultura Valdivia que se desarrolló en el actual Ecuador.

Todas estas evidencias, más arriba mencionados, hacen plantearse a los expertos de la ZAC que muy posiblemente desde la ciudad de Áspero se haya promovido rutas marítimas (siendo esta la principal), fluviales y terrestres que interconectaban a la civilización Caral con el resto de las sociedades de su tiempo, de costa, sierra y selva del antiguo Perú, quienes intercambiaban sus productos y sus conocimientos.

David Palomino, jefe de campo del sitio arqueológico de Áspero, sostiene que las investigaciones continúan, pero manejan dos hipótesis: la primera de ellas es que fue la gente de Áspero quienes viajaban por estas largas rutas interregionales para interactuar con otras sociedades de su tiempo. La segunda es que la gente de la Amazonía y otras regiones de los andes viajaban por esas rutas hasta llegar a la costa para interactuar con la sociedad Caral.

(Infografía: Raúl Rodríguez)

Pero los especialistas aún tienen varias incógnitas: falta determinar ¿qué fue lo que motivó estas relaciones interregionales en el antiguo Perú? ¿Si hubo algún factor determínate como el factor ambiental, u otros? ¿Que empujó a la necesidad de los antiguos pueblos a conectarse entre sí? ¿Es posible que gente de otras regiones se establecieran en Áspero? Con la finalidad de hallar las respuestas a estas o más interrogantes, Ruth Shady y su equipo, continúan trabajando junto con otros especialistas de las ciencias con quienes analizarán el ADN de los restos humanos hallados en el sitio. Ese es el siguiente paso en sus investigaciones y seguro que nos deparan más sorpresas.

Pero, a pesar de que aún existen las interrogantes más arriba mencionadas, la doctora Shady asegura que todas estas evidencias halladas en el sitio arqueológico vuelven a confirmar que las sociedades del antiguo Perú vivían bajo una visión de convivencia pacífica, no se han hallado evidencias de ningún tipo de armas en la antigua sociedad Caral, practicaban el intercambio comercial e interacción intercultural mediante las relaciones interregionales.

Datos de interés

-El complejo arqueológico Áspero posee una extensión de 18,8 hectáreas, dentro de esa extensión se han identificado 22 edificaciones que conforman el sitio arqueológico de Áspero.

-La antigua civilización Caral, que data de hace cinco mil años, es la más antigua del Perú y de América. Hasta ahora se han investigado 12 asentamientos urbanos que pertenecen a esta civilización, entre ellos está Áspero.

Fuentes consultadas: www.elcomercio.pe | Zona Arqueológica Caral | www.gob.pe

Fotos e ilustraciones: Zona Arqueológica Caral


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