La reconocida arqueóloga peruana, junto a otros
funcionarios que laboran en la Zona Arqueológica Caral, fueron amenazados de
muerte por presuntos traficantes de tierras.
La reconocida arqueóloga peruana
Ruth Shady, junto a otros
funcionarios que laboran en la Zona Arqueológica Caral, fueron amenazados de
muerte por presuntos traficantes de tierras que han invadido esa zona con el afán
de vender ilegalmente lotes de terreno.
Según señala
la agencia EFE, las amenazas se produjeron mediante llamadas y mensajes
telefónicos tras la denuncia que presentaron los funcionarios a la Policía y a
la Fiscalía por la invasión que se produjo en el área donde se hallan varios
edificios de la antigua Civilización Caral
causando daños irreparables a los mismos, hecho que ocurrió durante la
cuarentena.
Estos
mensajes amenazantes fueron dirigidos a la arqueóloga Ruth Shady y a los abogados Ricarte
Morocho y Kaleb Navarro, quienes
se encargaron de hacer los trámites solicitando las órdenes de desalojo de los
traficantes de tierras que habían invadido los espacios de la ciudad sagrada de Caral, complejo arqueológico que fue declarado
como patrimonio mundial de la humanidad en 2009.
En dichos
mensajes telefónicos los delincuentes afirman que saben sus movimientos, donde
viven y que hacen, que terminarán cinco metros bajo tierra y que ya están advertidos.
“Les vamos a dar vuelta”, advierten
en uno de los mensajes anónimos enviados por los facinerosos, los mismos que
los funcionarios de la Zona Arqueológica
Caral difundieron en un comunicado.
Ante este
repudiable hecho, los funcionarios que han recibido estas amenazas han
solicitado a las autoridades efectuar las investigaciones necesarias para
determinar de quienes se trata para poder denunciar a los responsables.
Ante este hecho,
el Consejo Nacional de Ciencia,
Tecnología e Innovación Tecnológica (Concytec) emitió un comunicado
expresando su total rechazo y su profunda preocupación por la violación del lugar
de estudio científico, cultural e histórico del Perú.
En dicho
comunicado, el principal organismo de investigación pública de Perú, exhortó a
las autoridades correspondientes a defender el mencionado patrimonio arqueológico
que han puesto en valor los investigadores y los científicos que laboran en el
sitio.
Cabe resaltar,
que la Zona Arqueológica Caral, por
estos días, está celebrando los 26 años
de su descubrimiento, para ello, los investigadores y los funcionarios han preparado
una serie de actividades, como la reapertura al público después de varios meses
de haber permanecido cerrada debido a la cuarentena.
El dato
-Ya en julio
de este año, el equipo que labora en este sitio arqueológico, junto al
Ministerio de Cultura, lograron detener
a unos agricultores que derrumbaron unos muros con maquinaria pesada de un
sitio arqueológico cercano. Como consecuencia de esa remoción del terreno se
halló infinidad de cerámicas destruidas, antiguas telas, tumbas con momias y
restos de lo que fueron viviendas en la época prehispánica.
-Los investigadores
han identificado, a lo largo de 40 kilómetros del valle del rio Supe, una
veintena de antiguas estructuras que corresponden a los diferentes asentamientos
de esta antigua civilización que se caracteriza por sus pirámides escalonadas
frente a grandes plazas circulares hundidas.
-Esta
antigua civilización surgió a partir del año 3.000 antes de Cristo en el valle
del río Supe, a150 kilómetros al norte de Lima, y es contemporánea a las
civilizaciones de Egipto, Mesopotamia, China e India.
Fuentes
consultadas: www.lavanguardia.com/
Agencia EFE
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