ARQUEOLOGÍA: Los moche, y sus poderosas mujeres gobernantes

Un estudio realizado por el arqueólogo peruano Régulo Franco, revela que esta antigua cultura, que se desarrolló en la costa norte del actual Perú, tiene similitudes con los mayas, además que ostentaba mujeres que alcanzaron un elevado puesto jerárquico.

La antigua Cultura Moche se desarrolló en los valles de la costa norte de lo que hoy es Perú. Dominaron el desierto y el bosque seco del norte peruano y reinaron entre los años 200 y 850 de nuestra era, en lo que ahora es la provincia de Trujillo, en la Libertad.

Esta cultura alcanzó un desarrollo cultural que es comparable con otra antigua cultura que se desarrolló en Mesoamérica, los mayas, y las últimas investigaciones arqueológicas han revelado que ostentaba mujeres que alcanzaron un elevado puesto jerárquico.

Los moches no desarrollaron la escritura, pero nos dejaron su prodigiosa iconografía y sus fastuosas tumbas, los cuales ha permitido a los arqueólogos desentrañar sus rituales, su modo de vida y su ideología.

Ahora, luego de varias décadas de estudios arqueológicos, los expertos, como en arqueólogo peruano Régulo Franco, han comparado a esta antigua cultura con los mayas. Este planteamiento ya había sido replicado por el  célebre arqueólogo peruano Julio C. Tello y, posteriormente, la investigadora estadounidense Elizabeth Benson, también halló similitudes en algunos aspectos generales entre moches y mayas, en su cosmovisión, su tecnología e iconografía.

Régulo Franco, señaló a la agencia Efe que todos estos detalles tienen un parecido pero no necesariamente son iguales, aunque resaltó otras semejanzas entre estas dos culturas como la construcción de sus templos piramidales sobrepuestos, las batallas rituales y los sacrificios humanos.

Pero a pesar de estas coincidencias que señalamos, existe una muy notable diferencia entre estas dos culturas: los mayas desarrollaron la escritura mientras que los moche fueron una sociedad ágrafa, eso ha dificultado la labor de los arqueólogos para llegar hacer interpretaciones más profundas.

El estudioso peruano aseguró que entre estas dos culturas se dieron estas similitudes solo por coincidencias históricas más no hubo una influencia directa de los mayas con la cultura que se desarrolló en la costa norte de lo que hoy es el Perú, que tuvo un desarrollo particular y autóctono, de origen andino, señaló. 

Mujeres poderosas

Además de todos los detalles antes mencionados, dentro de esta cultura destacan las muchas evidencias que sustentan la existencia de algunas mujeres que alcanzaron gran poder jerárquico y religioso.

Régulo Franco, quien presentó hace no mucho su libro titulado "El arte moche en el antiguo Perú. Simbolismo y poder", reveló a la agencia Efe que el descubrimiento de varias tumbas intactas ha permitido a los investigadores determinar que las imágenes que se pueden apreciar en la iconografía de esta cultura no son míticas o simbólicas, sino son representaciones de hechos históricos reales.

Régulo Franco, presentó hace poco su libro titulado "El arte moche en el
antiguo Perú. Simbolismo y poder"

El hallazgo de contextos funerarios cerrados y el estudio de los mismos, como las tumbas del Señor de Sipán, hallado en año 1987 por el arqueólogo Walter Alva, o los restos de la Señora de Cao, o las sacerdotisas de San José de Moro, así como de la sacerdotisa de Chornancap, sin duda, han sido una gran contribución que ha permitido a los arqueólogos develar detalles poco conocidos o desconocidos hasta ese entonces.

Todas estas evidencias arqueológicas halladas en las últimas décadas apuntan a que algunas mujeres de la cultura moche alcanzaron un elevado estatus jerárquico y religioso, cuya huella, al parecer llegó hasta la época de la invasión europea al Tawantinsuyu, según señalan los registros de las primeras crónicas españolas.

Los cronistas en el siglo XVI hacían referencia de la existencia de las capullanas, que eran poderosas mujeres guerreras y gobernantes (cacicas) en la costa norte del Perú y que actuaban similar a los hombres en esa época, señaló Franco.

Fue en el año 1991 cuando el hallazgo de unos contextos funerarios de mujeres denominadas por sus descubridores como las sacerdotisas de San José de Moro, por haber sido halladas en un pueblo con esa denominación, ubicada muy cerca de la ciudad de Chepén, permitió a los investigadores conocer que se trataba de un personaje que aparece representada en “las ceremonias de sacrificio" en la iconografía moche.

Más tarde, en el año 2011, fueron hallados los restos de la sacerdotisa de Chornancap, en un pueblo con la misma denominación ubicada muy cerca de la ciudad de Chiclayo, territorio que fue parte de la antigua cultura Lambayeque, y que también fue un personaje que alcanzó una alta jerarquía, aunque, según el arqueólogo Régulo Franco, “no gobernante, ni soberana".

Sin embargo, lo que confirmó al investigador el máximo estatus de poder que alcanzó una mujer moche fue el descubrimiento de la tumba de la Señora de Cao en el año 2006, en el sitio arqueológico El Brujo, ubicado al norte de la ciudad de Trujillo.

 La Señora de Cao, fue hallada el año 2006, en el sitio arqueológico
El Brujo. | Foto: Museo Cao

Régulo Franco, su descubridor, afirma que la tumba de esta reina moche nos revela mucho sobre la jerarquía de la mujer en el antiguo Perú, ella si posee los emblemas de poder de cualquier personaje masculino de aquella época, detalló a la agencia Efe.

Entre los emblemas de poder que esta antigua jerarca moche conservaba en su tumba, figuran coronas y un báculo, el mismo que le daba mucho prestigio, fama y poder a esta mujer que estaba en la cumbre del estatus social de su tiempo, explicó Franco

Si bien es cierto, todos estos descubrimientos nos obligan a repensar muchas interpretaciones que se tenían de nuestro pasado, aun no se puede afirmar, por el momento, que en las culturas que se desarrollaron en la costa norte del Perú existía un matriarcado porque solo se tiene una importante evidencia arqueológica, la Dama de Cao, señaló el arqueólogo.

Evidentemente, los numerosos hallazgos arqueológicos que se han realizado en las últimas décadas nos han permitido rescribir nuestra historia y reinterpretar el modo de vida de nuestros antepasados. Aun así, los estudios que se han hecho no son concluyentes, eso debido a que en el Perú aún hay mucho por descubrir y aún hay mucho por investigar.

Fuentes consultadas: Agencia Andina / Agencia Efe / www.gestion.pe

Foto de portada: Máscara de madera moche / Representación del rostro de la Dama de Cao/ Museo Cao

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